Existe el Departamento Nacional de Investigaciones. Ahora el DNI será la Dirección Nacional de Inteligencia, que unifica todos los organismos que tienen que ver con seguridad nacional y coordinará lo relativo al Sistema Nacional de Inteligencia. Eso incluye todas las operaciones de inteligencia y contrainteligencia que involucren tanto a militares como civiles, y tiene que ver con identificar las amenazas a la seguridad nacional a través del manejo de la información.
Esto es más que un cambio de nombre, porque la DNI 2.0 reportará directamente al Poder Ejecutivo, y no a las Fuerzas Armadas como la versión anterior. Pero ahora se sabe que también tendrá más alcance y poder, y con la aprobación de la ley en el Congreso, han salido distintas voces, tanto de la oposición política como de grupos de la sociedad civil, a prender bombillos rojos por algunas cosas que están incluidas en ella.
Las principales preocupaciones se enfocan en el artículo 11 de la nueva ley, que dice que cuando se trate de asuntos que puedan afectar la seguridad nacional, «todas las dependencias del Estado, instituciones privadas o personas físicas» están obligadas a entregarle a la DNI todas las informaciones que esta requiera. A pesar de que también dice que eso debe hacerse sin perjudicar el derecho a la intimidad y el honor personal, algunos se han metido en miedo por los posibles abusos de poder y violaciones a los derechos humanos que se podrían cometer.
La Sociedad Dominicana de Diarios (SDD) también tiró una voz de alerta, no solo por el artículo 11, sino por el 9 y el 26. Este último establece castigos de 2 a 3 años de cárcel y multas desde 9 a 15 salarios mínimos contra quienes «oculten informaciones» que les pida la DNI.
En resumen
La DNI es importante para el Estado porque tendrá el trabajo de investigar y recopilar y procesar información que tenga que ver con cualquier actividad que atente contra los intereses nacionales, las instituciones del Estado, o que ponga en riesgo la seguridad nacional. Pero todo eso debe hacerse sin amenazar los derechos fundamentales de todos nosotros, y manteniendo un equilibrio entre seguridad y libertad.
La DNI es importante para el Estado porque tendrá el trabajo de investigar y recopilar y procesar información que tenga que ver con cualquier actividad que atente contra los intereses nacionales, las instituciones del Estado, o que ponga en riesgo la seguridad nacional. Pero todo eso debe hacerse sin amenazar los derechos fundamentales de todos nosotros, y manteniendo un equilibrio entre seguridad y libertad.